Con esta innovación, Borge pretende poner en valor «el potencial de Castilla y León en biomasa, especialmente, y de países iberoamericanos como Colombia», comenta a DiCYT. En su tesis doctoral, el investigador pretende definir modelos matemáticos que se plasmen en el diseño de estos sistemas de gasificación locales. «Actualmente no hay datos que permitan diseñar gasificadores de pequeña escala, por lo que desde el mundo empresarial no se fabrica este tipo de sistemas», explica.
El trabajo tiene una importante vertiente social. A través del desarrollo de estos sistemas industriales, se puede subministrar a poblados dispersos fuentes de energía. «Permitiría conservar, por ejemplo, en frigoríficos medicamentos o calentar escuelas, lo que facilita el desarrollo de comunidades locales», ejemplifica el científico. En Castilla y León, por su parte, proporciona dos ventajas: «Fijar población rural» al mejorar las condiciones de vida en los pueblos y «disminuir los riesgos de incendios forestales por mal mantenimiento de los bosques».
En la actualidad, ya existen equipos industriales experimentales de gasificación de biomasa, pero son a gran escala, para centrales térmicas, por ejemplo. Borge desarrolla, junto su tutor Juan Fernando Pérez, de la Universidad de Antioquia, un gasificador experimental que cubra las necesidades en una población rural en Medellín. Las pruebas actualmente se realizan en laboratorio, pero la idea de los científicos es trasladar la experimentación a alguna aldea que rodea la capital del departamento de Antioquia. En concreto, el trabajo del investigador español se centra en el estudio experimental y teórico de cómo influye el tamaño de la biomasa para producir energía.
Sin necesidad de pulverizador
El sistema que desarrolla Borge no necesita la adquisición de un pulverizador industrial que convierta la materia prima en biomasa, sino que, «con materiales agrícolas como hachas o un tractor» se puede emplear las fuentes energéticas (por ejemplo, madera) en el gasificador. Tampoco es necesaria la presencia de un ingeniero para la instalación de estos sistemas en las comunidades rurales. Este proyecto permitiría, por ejemplo, aprovechar los residuos forestales de pinares. El investigador pretende trasladar la experimentación que actualmente se lleva a cabo en Colombia a laboratorios de Castilla y León, concretamente, de la Universidad de Valladolid.
Paralelamente, el científico está desarrollando una línea de investigación relacionada con la producción de frío a partir de placas de captación de energía solar térmica. Estos equipos, «poseen un inconveniente importante: necesitan flujo de agua, lo que limita su utilización a entornos en los que se dispone de este recurso». El científico investiga si es posible que, en vez de agua, se puede condensar el aire, como un sistema de aire acondicionado. Este trabajo se está desarrollando bajo la dirección del profesor Juan Daniel Marcos, de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) y el autor pretende confeccionar un equipo experimental en el plazo de un año.
Fuente: dicyt