Afectados por la línea, vecinos, ganaderos, ecologistas y usuarios de los montes celebran la sentencia del Tribunal Supremo que anula un tramo del tendido.
No se le pueden poner barreras al monte, pero para los muchos afectados de Triano las 24 torretas de alta tensión levantadas por Red Eléctrica de España (REE) y declaradas ahora ilegales por el Tribunal Supremo eran los retorcidos barrotes de una extraña prisión. Vecinos de Galdames, ganaderos, ecologistas o simples usuarios de este entorno natural han mantenido una batalla civil y judicial que parecía imposible ganar. Se han realizado marchas, se han recogido firmas y los árboles de acceso al monte están plagados de carteles contra la línea Penagos-Güeñes. El pasado año muchos perdieron la esperanza. Fue cuando los camiones de obra se adentraron por las viejas rutas forestales y comenzaron a erigir con pies de plomo estos gigantes de metal. Todavía faltaban de instalar los interminables cables de alta tensión inyectados con 400.000 voltios de energía. Ahora, el reciente pronunciamiento de los tribunales a instancias del grupo ecologista Izate ha devuelto la ilusión a los afectados.
07/11/2010
Fuente:elcorreo.com