Ingenieros de la Universidad de Chile han conseguido crear SiC biomórfico, un carburo que es más duro que el acero, siguiendo un proceso de petrificación de la madera con medios más simples y baratos de los usados normalmente. El producto final no pudo cortarse con una sierra de acero, sino con una diamantada. Esta cerámica obtenida de la madera es útil especialmente en aplicaciones a elevadas temperaturas (puede aguantar hasta los 1.650 ºC), como resistencias eléctricas o reforzantes estructurales.